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Si usted trabaja en cualquier industria que utiliza instrumentación de presión y temperatura para mantener sus aplicaciones de proceso funcionando de forma segura y eficiente, hay una buena probabilidad de que esté familiarizado con los manómetros o sensores Ashcroft. Esto se debe a que Ashcroft ha estado fabricando instrumentos de medición de presión y temperatura desde su creación hace más de 170 años. Sin embargo, lo que tal vez no sepa es que Ashcroft también fabricaba relojes náuticos a finales del siglo XIX.
He estado trabajando en Ashcroft durante más de 30 años. Como Vicepresidente y Gerente General de Ashcroft Norteamérica, es mi trabajo conocer la historia de Ashcroft y la amplitud y profundidad de los productos que hemos ofrecido a lo largo de los años. Ver la cronología de los instrumentos expuestos en el vestíbulo de nuestra sede en Stratford, CT, es siempre emocionante. Pero nada puede contar una historia como los recientes descubrimientos de instrumentos Ashcroft encontrados en barcos hundidos que habían estado perdidos en el mar durante más de un siglo.
En este artículo, usted aprenderá acerca de dos de estos descubrimientos que se produjeron sólo en el último año. Cada incidente arroja un poco de luz sobre cómo Ashcroft comenzó y por qué seguimos siendo una de las principales autoridades en el campo de la instrumentación de presión y temperatura.
Reloj náutico Ashcroft hallado en un naufragio frente a la costa de Bridgeport, CT
Hace poco conocí a Kurt Mintell, un marine estadounidense retirado que ahora trabaja para el Cuerpo de Ingenieros del Ejército. Kurt es también un buceador recreativo que opera desde varios barcos de buceo en busca de pecios.
Durante una de estas excursiones por la costa de Long Island, Kurt buceaba desde una embarcación llamada RV Karma. Se encontró con los restos de un naufragio. La estructura de madera casi había desaparecido, pero eran visibles la proa, la caldera, el motor, la hélice, la popa y el eje de la hélice del barco. Durante la exploración, enterrado cerca del motor, Kurt vio algo que parecía una placa de metal. La retiró y volvió a subir al barco de buceo para seguir investigando el hallazgo.
Figura 1. Kurt Mintell Kurt Mintell busca artefactos perdidos de un naufragio frente a la costa de Bridgeport, CT.
Figura 2. El reloj no identificado hallado en el mar.
Tras una limpieza exhaustiva, Kurt pudo ver lo que parecían los mecanismos de un reloj y pudo ver las marcas que confirmaban que había sido fabricado por la Ashcroft Manufacturing Company. También pudo leer una inscripción en la esfera del reloj que decía "Neafie & Levy Ship Building Company". Entusiasmado por tener una pista que pudiera identificar el barco, Kurt entregó el reloj a su historiador para que buscara más pistas en los archivos. Por desgracia,era un callejón sin salida.
Figura 3. El reloj náutico restaurado de la Ashcroft Manufacturing Company.
Por fin se revela la identidad de la nave.
Dos años después del hallazgo inicial del reloj Ashcroft, Kurt y su tripulación volvieron al lugar del naufragio en busca de más pistas para identificar el barco que habían descubierto. Durante esta inmersión Durante esta inmersión, localizaron la carga del barco y se divirtieron al descubrir que el barco transportaba máquinas de coser. Esta gran noticia les llevó a seguir investigando en los archivos, donde encontraron un artículo que documentaba un naufragio frente a Stratford Shoal. Stratford Shoal (también conocido como Middle Ground) se encuentra a medio camino entre Long Island y la costa de Connecticut y está marcado por un faro para que las tripulaciones puedan navegar fácilmente por esta difícil zona de agua.
Aegún el artículo, el incidente involucró al farero William Hardwick y a un barco de vapor llamado Calvin Tompkins. El Calvin Tompkins transportaba piezas fundidas de máquinas de coser por la costa desde Nueva York hasta Bridgeport (Connecticut) para su entrega a la fábrica de máquinas de coser Singer en Bridgeport (Connecticut). Una fuerte tormenta hizo que el barco hiciera agua y acabara hundiéndose. Se atribuye al cuidador Hardwick el rescate de siete hombres del naufragio, en el que murieron dos tripulantes.
Figura 3. Artículo que documenta el naufragio del Calvin Tomkins.
Bucear en busca de tesoros es un negocio arriesgado.
Buscar restos de naufragios es una empresa muy costosa que requiere mucho tiempo y entraña grandes riesgos. A menudo, estas excursiones te llevan a más de 250 millas de la costa, donde puedes estar en el agua entre 5 y 6 días haciendo inmersiones a 200-300 pies de profundidad para ver qué hay en el fondo. explica Kurt,
"Una vez que me he puesto todo el equipo, estoy listo para descender 90 metros por la línea de anclaje y explorar en la más absoluta oscuridad. A partir de ahí, tienes unos 8 minutos en el fondo donde esperas sacar un par de fotos, agarrar cualquier cosa que puedas ver, y luego hacer unas 2 horas de descompresión por hacer eso. Después, probablemente no vuelvas al mismo sitio en otros cinco años".
Para Kurt, todo merece la pena. Además de ser su pasión, explica: "Hay mucha implicación de la comunidad de buceadores. Por ejemplo, muchos de los artefactos que encuentro viajan a simposios para ser expuestos y a menudo me invitan a hablar a los estudiantes del programa de buceo de UCONN sobre mis experiencias y los objetos que recupero. Incluso ayudan en algunos proyectos de restauración".
La mayor recompensa es cerrar el caso.
La historia del naufragio del Calvin Tomkins y el reloj Ashcroft tuvo el mejor de los desenlaces posibles. Kurt y su equipo lograron identificar el navío y el reloj. Después de unos largos años, y de un encuentro fortuito conmigo, el reloj Ashcroft cerró el círculo cuando Kurt lo trajo de vuelta a Stratford y me lo presentó para que lo expusiera en la sede de Ashcroft.
Figura 4. El reloj náutico Ashcroft vuelve a casa, a Stratford.
Otro descubrimiento relaciona un manómetro de vapor Ashcroft con un barco perdido en el Triángulo de las Bermudas.
A principios de este año, el número de serie de un manómetro de vapor Ashcroft de 1864 ha servido para identificar otro barco perdido en el mar en 1865. Según el Canal Historia, que emitió sus hallazgos el 9 de enero de 2024, un gran barco de madera llamado SS D.H. Mount desapareció poco después de que terminara la Guerra Civil.
En el episodio, un equipo de buceadores investiga el naufragio, que se cree es una de las primeras víctimas del Triángulo de las Bermudas. El barco zarpó de Nueva York con 22 políticos favorables a la Unión encargados de reconstruir la estructura política de posguerra de la Florida confederada. Se informó de quetodos los políticos a bordo recibieron amenazas de muerte. Entonces, en una franja de agua que más tarde se conocería como el Triángulo de las Bermudas, el barco desapareció. Aunque los buzos hallaron pruebas de que pudo haber un incendio en el navío, nadie sabe con certeza el destino del barco y sus pasajeros.
Se considera que el SS D.H. Mount fue uno de los primeros barcos en caer víctima de la infame franja de agua conocida como el Triángulo de las Bermudas. Para saber más, vea "El Triángulo de las Bermudas:En aguas malditas".
Cómo empezó Ashcroft durante la revolución industrial.
En 1852, el fundador de la empresa, Edward Ashcroft de Lynn, Massachusetts, comenzó a fabricar instrumentos para la industria de la energía de vapor con el fin de evitar que los trabajadores se lesionaran con herramientas de calidad inferior y poco fiables. En esa época, la energía de vapor era la principal fuente de energía del transporte, por lo que era común ver manómetros Ashcroft y otros instrumentos en las salas de calderas de locomotoras y barcos. Uno de esos otros instrumentos era el reloj náutico Ashcroft. Estos eran comúnmente utilizados en las salas de máquinas con fines de navegación.
Figura 5: Ashcroft Manufacturing Company, Bridgeport, CT
¿Listo para aprender más acerca de Ashcroft?
Estos dos descubrimientos recientes son sólo un recordatorio de cómo los instrumentos de presión y temperatura de Ashcroft jugaron un papel integral en la expansión del transporte de locomotoras y barcos de vapor en los EE.UU. durante la Revolución Industrial. Hoy en día, nuestros productos son un aspecto crítico de los procesos y sistemas en prácticamente todas las industrias.
Visita Ashcroft.com para aprender más sobre Ashcroft y nuestros productos. O, para hablar con alguien directamente, no dude en ponerse en contacto con uno de nuestros expertos en productos con cualquier pregunta que tenga.
